26 de julio de 2007

El síndrome pre-final

En menos de 48 hs. rindo y ya estoy sufriendo el síndrome pre-final. Si alguna vez rendiste un exámen habrás experimentado los siguientes síntomas:
- Hacer lista de toooodas las cosas pendientes que aún no hiciste (desde cortarte el pelo y comparar todo lo que falta en tu ropero, hasta tirarte en paracaídas o plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo)
- Tener más sueño del que pensaste que podía ser posible. No importa cuanto dormiste la noche anterior, 6, 7, 10, 15 horas... siempre estarás agotado para sentarte a estudiar.
- Hacer un cronograma de estudio organizando por hora, fecha, día, unidad, bolilla, capítulo con toooooodo lo que te falta estudiar... para no cumplirlo jamás.
- Preparar a la gente para un posible bochazo, cada vez que te preguntan: como vas?, poniendo excusas como: esta materia es un quilombo, es larguísima, no sirve para nada y es puro chamuyo; quieren que estudies de memoria hasta los puntos y las comas de los textos; todo el mundo la tiene que dar 2 o 3 veces antes de aprobarla; si te toma el titular de cátedra no tenés chances; etc.
- Te llaman todas tus amigas con miles de propuestas, salidas, invitaciones y a todas les decís que no, solo para quedarte más deprimida que antes por estar sentada delante de las malditas hojas.
- En 10 minutos pasás del panic atack en el que decidís no dormir por los próximo días para hacer un último esfuerzo a la más absoluta indiferencia nerviosa, en la que te tirás a mirar tele, porque aunque no apruebes tenés que disfrutar la vida y no todo tiene que ser sufrimiento.
- Rescatás de tu lista de contactos a todos tus viejos conocidos de facultad en pos de conseguir mejores resúmenes o teóricos desgrabados de los que ya tenés.
- Te mentís a vos mismo con razonamientos tales como que estás harto de dar materias preparándolas tan mal, que mejor ser un buen estudiante y no buscar el milagro del 4... mejor apuntar a un 10 y preparar esta materia como se merece... la doy en el próximo cuatrimestre y fue...

Afortunadamente parte de este síndrome pre-final es la negación absoluta a volver a pasar por esto y para colmo por la misma materia... y así con gran arrojo y valentía tomás en tus manos el lápiz y el resaltador junto con la pila de hojas de resúmenes, respirás profundo un par de veces y te lanzás al magnífico mundo del conocimiento.

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